viernes, 26 de noviembre de 2010

Evoluindo a que cada día valga la pena ser el último!

Comienzo a actualizar un poco:


Definitivamente, si hay algo que me hizo pensar mucho hacia donde estaba yendo mi vida, fue el discurso de Steve Jobs en el cual, después de que le dieron un parte errado de que moriría en tres meses, decidió que todos los días de su vida se miraría al espejo y se diría: 2Si este fuera el último día de mi vida, haría lo que voy a hacer hoy?”.

Definitivamente por mi forma de ser, esa decisión me pareció correcta, intenté mirarme al espejo y practicar la pregunta para mí, y la respuesta fue, que al tercer día, dejé de mirarme al espejo a la mañana (es por eso y no por desalineada, que llegaba despeinada al trabajo!).

A pesar de no quererme mirar al espejo, la pregunta me seguía como un karma durante todo el día, todos los días. Cada vez que pensaba en las 10 horas que estaría en la oficina, la vuelta cansada hasta para ver a los amigos y disfrutar de la casa, los malos tragos y las discusiones nocivas en el trabajo, me gritaban la respuesta: NO!

Ahí se me aparece Einstein en la cabeza, que para alguien brutito como yo en la materia, E=MC2 no significa nada, por lo tanto, su descubrimiento más revolucionario, para mí fue saber que: Si seguís haciendo las mismas cosas, vas a seguir obteniendo los mismos resultados.

A través de un proceso leeeeeeeeeeeeeento, de caídas de gotitas, la misma, horadó la piedra. Ahí fue que decidí dejar de hacer las cosas de la misma forma que las estaba haciendo. No me sentía ni con la fuerza para hacer algo propio, y cada vez me sentía más dependiente del salario ganado mensualmente.

Toda esta intro, es para contarles, que he descubierto la manera de que, en este momento de mi vida, no me cueste mirarme al espejo y preguntarme si este podría ser el último día de mi vida.

Por estos lares, encontré personas, la mayoría de los importados que se encuentran por acá, que están en la misma búsqueda que yo: la interna. Personas que ya se animaron a patear el tablero para barajar de nuevo.

Ya no trabajo más en la cachacaría, porque mi jefe se enojó de que me tomé mi día libre para dedicarme a trabajar en un evento deportivo, PARABENS PARA MIM!

Para festejar mi desempleo, agarramos unas bicis y nos fuimos a pasar el día a las cachoeiras (cascadas) de la región. Luego de casi morir en las subidas (olvidando mi pésimo estado físico), llegamos a unas cachoeiras hermosísimas, con las piedras cuadradas cortadas como a cuchillo, cubiertas por un paño de musgo verde fluor, que, mientras entraban los rayitos de sol por los altísimos árboles, daban un show para mis ojos! Masaje de cachoeira en la espalda, con el agüita bien fresca, como si todo el power de la natureza quisiera entrar en mí, me hicieron sentir una conexión directa con ella. Si hay algo que no se les puede criticar a los brasileros, es la capacidad de sentirse parte de la natureza!.

Tomada de sol desparramada en la piedras, baño fresquito nuevamente, y a descender toda la subida agonizante, con todo el viento en la cara, y agradeciendo a Dios, o a quien sea, el haberme animado a todo esto!

Llegada a casa, bañito y a hacer show de escenario con Juancito, mi parceiro de guitarra. Noche divertida de más, con ganancias de menos!

Llegó toda la galera (grupo) de amigos a hacer palmas, cayendo poco a poco, mientras iban saliendo de sus trabajos, la mayoría frente al mar, con mate y charlas, y siempre algún amigo cayendo…trabajos relajados!.

Resumen del día: PODRÍA HABER SIDO EL ÚLTIMO!

Ahí empezó la idea de volver al mundo marketinero Perfecto! Pero a mi manera! Me hago un viajecito a la playa paradisíaca y desierta de Martín de Sá y vuelvo a pensar cómo hago grana (dinero), aprovechando mi título, y sin volver a tenerle miedo al espejo.

Nos levantamos a las 6 de la mañana, y pegamos el ómnibus a Parati-Mirim, a ver si podemos hacer carona (dedo) con algún barquito pesquero. Fracaso con todo éxito. Así que aprovechamos para desayunar mirando la playa del pueblito donde está la primera iglesia de la región, a esperar el ómnibus que nos llevara de vuelta a Paraty.

En Paraty, nos fuimos al casi (puerto) de pescadores, a levantar el pulgar nuevamente.

No conseguimos carona hasta la 1 de la tarde, así que me dediqué a mirar la vida de los pescadores, que ya se instalaban en un bar improvisado (pero fijo!), en el cual compartían anécdotas, cervezas, alguna que otra Gabriela (cachaca dulce), y caldo de caña, producido en el momento, con una máquina rústica que tritura las cañas hasta sacarles, literalmente, jugo!. PUAJJJJJJJJ, DUUUULCE PA CASETTE!, verdoso, turbio, con espuma….definitivamente no es para mí.

Lo logramos!, una y media, estábamos subiéndonos a un barquito, que nos llevaría en un viaje de 2 horitas, hasta Pouso da Cajaiba!, un lugar que queda en el continente, pero parece una isla. Es un pueblito de playa, que promete, desde el barquito, ser un paraíso por sí mismo! Con su iglesia, en la playa, su almacén, en la playa, sus arcos de fútbol y toda la niñada jugando, en la playa, los bares, en la playa…sus casas…en la playa… En fin…una aldea playa!

Desde el barquito se veía también el morro Montañón que deberíamos subir para llegar al otro lado: Martín de Sá!. Comienoz la trilla, como siempre, desconfiando de mi capacidad de guardarme los insultos para mi misma, y sorprendiéndome luego de terminar con la subida y empezar la bajada, de no haber insultado a nadie! Todos felices.

Pasamos por una piedra llamada “Toca da Onza”…se me ocurrió preguntar qué significaba: “Casa de los leopardos”, Weeeeeeeeeeeeeeee, que tranquila me quedé! Estos brazucas son súper piolas para poner nombres!

Ya desde arriba se veía el paraíso, y desde el medio de la selva, se empezaba a sentir el ruido del mar… Descendimos rápido y llegamos al camping, donde nos atendió doña Capitalina, madre del dueño del lugar, con sus 102 añitos…

Para salir a la playa pasamos un poquito más de selva y VOILÂ! Playa desierta, de aguas turquesas, arena blanca, y tronquitos suficientes para animarse a pronosticar una fogata nocturna!. (fotos en el facebook).

Disfrute del día, la soledad, el silencio…dormir escuchando el mar, despertar viendo el paraíso a través del tejido de la barraca (carpa), fueguito para almorzar, y zambullidas todo el día.

Noche hermosa, hasta que el viento empezó a darnos como en caja, se abrió el cobertor de la barraca, y el pampero brasilero nos pasó por arriba, dejándonos un stock de arena suficiente para llenar un container, todo encima de nuestras cosas…y de nosotros mismos!

Amanecer, rearmado de cosas, trilla, parabéns para mim en la subida nuevamente dejando a todos atrás y parando para esperarlos, botecito de uno de los dueños de bar que iba a comprar hielo al pueblo y se quedaba dos días de pesca sólo en el mar, y a casita!!!!!!

Conclusión de los días: TODOS PODRÏA HABER SIDO LOS ÜLTIMOS DE MI VIDA!

Bueno, como adelanté, empezó la idea de hacer algo que verdaderamente haga que valga la pena que llegue la temporada, y mejor aún, de la mano de mi profesión: Decidimos que vamos a largar la GUIA DE ACTIVIDADES DE PARATY.

Ahí nomás comenzamos el diseño, y en 4 días ya quedó armada, Una guía sólo en inglés, que pretende salir de la media medio pelo de los box de publicidad tradicional, que a mi criterio NO FUNCIONAN si no tienen el entorno indicado.

Esta semana empieza la venta de anuncios, aunque ya cerramos algunos, la idea cayó más que bien entre los amigos, así que todos andan dando una mano.

Veremos que pasa, pero….ME SIENTO EN EL CAMINO CORRECTO!, esto va perfecto para ser lo último que haga. Resumiendo: Emprendimiento propio, con libertad y palmeras de fondo!, que tal Pascual?

Gracias Steve!