Contada de cumpleaños con retraso!

Parabéns para mim!!!!

Como ya todos los que me conocen sabrán, mi día comenzó la noche del 15 de Junio.

Arrancamos a la noche caminando por las calles de Paraty, viendo el festejo Brasilero que es muy similar al nuestro: Jóvenes en la calle y alcohol a mansalva.

Mi cumpleaños arranca en medio de las callecitas, con saltos y saludos en los que estuvieron Charly, Gise, y un Yanki que hablaba español porque estuvo viviendo dos años en Chile: como todo acá, una mezcla buena onda!.

Fuimos a la playa, frente a mi posada, a las hamacas y subibajas, sólo hizo falta un cigarro como vela, y una tortita de arena para mi primer brindis!

Cucha, y arranca el gran día!

Me levanté ansiosa a las 8 de la matina, creyendo que ya era tarde!!! (cabe destacar que ya me compré reloj despertador!!!, imposible vivir 100% deconectado del mundo real…Porra! – que es como decir “pucha” en español-)

Segunda soplada de velitas, un encendedor…y buéh, e lo quiai!) Me crucé con Wagner, el cachacero, y me prometió la torta de cumpleaños.

Wagner: Voce ja tem bolo?

Sole: Ah?

Wagner: Bolo!

Sole: ….mmm…nao brigada…(por las dudas!!!!)

Wagner: eu vou regalar teo bolo de aniversario.

Sole: mmm…bolo?...nao brigada!. AAAAAAAAAAAAAAAAHHHH!!!! TORTA!!!!

Si! Brigada!

Tuve que ir a la oficina, así que ahí comenzó la noche con unas cervezas en la oficina, el after office que le dicen. Ahí ficamos con Pablo, Vivi y Paulo, los rodoviarios, y después se sumó Gise, la pizzera, y Charly, el faz tudo de Geko.

Se sumó también a nuestra fiesta un muchacho Brasilero que resultó ser el novio de una escocesa que conocí en el Kaissara ( Hostel de Trinidade).

Luego del after, las tres sobrantes (Gise, la parabéns y Vivi), decidimos coronarnos como reinas Skoll, pegándonos la etiqueta en la frente, y salimos al super.

Mientras caminábamos por los pasillos del super, cantando PARABËNS PARA MIM, coronadas de Skoll, encontré unos teléfonos celulares de plástico contenedores de jugo…EPA!!! Me los llevo!

Fiel a mi estilo, cuando fui a pagar, llevé una tarjeta vencida…las dejé a las chicas de clavo, y me fui corriendo a la posada, busqué tarjeta correcta, y pedí prestada una bici sin frenos. En la bajadita al puente, de tanta emoción, casi me llevo puesto a un muchacho!...a veces subestimamos la importancia de los frenos!

Llegué, rescaté a las amigas, y salimos las tres meta parabéns para mim!.

Ya en el pontal (playa donde vivo yo) nos esperaban Elí y George, de Trinidade, Eduardo, un personaje muy chistoso fana del Palmeiras, y los muchachos de los otros hostels.

Logré que Victor me ponga música, y se armó la fiesta en la vereda. Después llegaron Paulo y Johnny, dos compañeros de oficina, con grupos de chicos de sus hostels.

Armé las caipirinhas en jarras, y saqué el fernet 1882 que había reservado para tan especial momento, y arrancó la fiesta.

Que se vengas los chicos de todas partes, que vengan de la Luna, y los de Marte! Tuvimos italianos, irlandeses, brasileros, argentinos, ingleses, etc.

Enter la Vivi, Gise y yo, nos sentimos exclusivas, fastidiamos a todo el mundo, y taladramos el cerebro a todos los invitados con el Parabéns para mim!. Me cantaron el cumpleaños en varios idiomas, y soplé las velitas con el 28 unas 10 veces, porque a Vivi ya no le daba la claridad para darse cuenta de que íbamos la vez 5, la 6, la 7, la 8 y así sucesivamente!

LEMBRAR O BOLO!, era la consigna de la noche (recordar la torta!).

Ahí decidí dar una misión a mis co-equiper: Sacarle foto a todas las personas que estuvieran en la fiesta, hablando pro mi celular de juguito! Misión lograda con todo éxito. Como conclusión: cuando la gente bebe mucha caipirinha, le agarran unas ganas suculentas de hablar por teléfono de juguito! (ya haré la tesis de eso y me llenaré de dinero!).

Éxito total. Resultado: Todos querían abrir mi celular y tomarse el juguito, y finalmente, mi flamante equipo, desapareció.

La fiesta se armó divina. Me hicieron algunos regalos: Un vino argentino ( un inglés!), una cerveza artesanal, una pinga (cachaca) de pitanga, una Gabriela (bebida típica de Paraty y codiciada), un arito (la Vivi), y eso es totodo amigos! Lindas sorpresas!.

De acá partimos en búsqueda de bares!. Llegamos a uno que nos vendía bebida pero no podía poner música porque estaba atrás de la iglesia!, jajjaa, ahí nomás arrié al ganado, y terminamos en otro bar, sambamos un rato, danzamos otro, saltamos otros, y a la cucha!.

Resumen? DE PUTA MADRE!